viernes, 17 de agosto de 2007
Otro Día
Para los que no hacemos más que el tramo final del Camino de Santiago hay que correr mucho para poder aprovechar los dias. Si, correr, pero no como aquel que vimos, mis compañeros de viaje y yo, no. Hay que correr para poder entrar dentro de un@ misma y reiniciar los cambios a marchas forzadas.
Algunos dirian que es una conversión, pues si, lo es.
Al caminar ves parajes impresionantes, descubres que te has perdido muchas cosas en la vida y que están ahí............... es algo que solo un@ misma puede calibrar y ver que se perdió y que tiene que recuperar.
Por supuesto, reencuentras a Dios en cada nieblecita, piedrecita, en los treboles de 4 hojas (que haberlos los hay) que Dios pone en el Camino.
He descubierto que me gusta más, si cabe, la naturaleza de lo que yo pensaba y que andar es divertido, si divertido.
En el Camino un@ recuerda a todos los queridos, a las amigas y amigos. A esos que están siempre y a los que no están. Es tiempo de poner cosas en su lugar y ver cual es la situación adecuada de cada uno en la vida de los otros y viceversa. Es también una forma de "estar" con los que ya se han ido o con los que han querido marcharse. Si, porque estás con los recuerdos y como tienes tiempo de sobra puedes ver con claridad cuales son reales y cuales has distosionado.
Ves tu valor, redescubres tu lugar en la naturaleza. Eres una pieza ( y menuda pieza) más en el mundo, pero eres la pieza querida Dios, que ahora anda y anda hacia Santiago.
Ahora he de recordar lo que he estado aprendiendo de mi y de los demás.
Ya no me acuerdo de como me dolian las piernas.
Mis Compañeros de viaje son: (los valeintes que lo terminarosn a la primera)
Marivi
Juan Carlos
Raquel
Tambien nos acompañaron:
Las tiritas.
Los compeed
La vendas antiampollas
Y esa crema de Marivi que crea costra..............
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